miércoles, 26 de marzo de 2014

Campamento en Guía - 22 y 23 de Marzo.

Hola a todos!!!

El fin de semana pasado, el Clan Rover Perenquén nos fuimos de campamento junto con la Unidad Esculta Akoran a Guía con la intención de echar una mano en el proyecto de acondicionamiento de un nuevo albergue que están llevando nuestra querida Oo.

Empezamos a llegar a Don Benito a eso de las 9. Al poco de llegar, Fabiana (nuestra nueva adquisición), contactó con nosotros, ya que no le daba tiempo de coger la guagua con nosotros. En el momento de subir y de encaminarnos hacia la zona de acampada éramos tres rovers: Jorge, Néstor y Diana.

En la guagua Hathi nos contó una gran gran gran noticia: ¡¡¡¡¡NOS VAMOS AL FESTIVAL NACIONAL EN TERRAMÍTICA EN MAYO!!!!!

Todavía con la emoción en el cuerpo, llegamos a Guía y allí nos encontramos con Oo, que nos estuvo contando un poco por encima qué íbamos a hacer y cómo nos íbamos a distribuir. Así mismo, nos presentaron a Davi (Davinia), la futura socia de Oo, y a su hijo Tesén. Ambos nos estarían ayudando durante todo el fin de semana. La Esculta se dividió en tres grupitos, y comenzamos.

Por la mañana estuvimos adecentando el comedor, ya que era el lugar donde dormiríamos por la noche. Organizamos, raspamos una puerta metálica, vimos algún bicho raro y baldeamos y fregamos el suelo.




Después de eso, ayudamos a la Esculta a subir material a una habitación que posteriormente denominaríamos como "El Puzzle".

Llegó la hora de comer, y con ella Fabiana, que, aunque le costó, al final acabó dando con nosotros.

Después de comer tuvimos tiempo libre, que invertimos sabiamente en jugar a las cartas.

Nos llamaron y comenzamos con las actividades de la tarde: Cubicar la habitación del Puzzle, seguir raspando (esta vez una pared), limpiar el camino de malas hierbas y pintar. La pintura con la que estábamos cubriendo todas las maderas exteriores (marcos, ventanas y contraventanas, principalmente), es de estas pinturas pegajosas y QUE NO SE QUITAN (yo hoy he conseguido terminar de quitarme lo que me quedaba, ¡Y NO HA SIDO FÁCIL!).


A media tarde Jorge se fue, así que volvimos a ser tres. Merendamos y seguimos con las tareas.

Ya cuando empezó a caer la noche, colocamos las mesas y sillas en el aula donde cenaríamos, así como llevar las mochilas y colocar los foanes y sacos en el comedor. Allí se quedó la Esculta, mientras que nosotros hicimos la cena junto con los scouters.

Cenamos unas riquísimas hamburguesas de pollo, queso o bacon, y, cabe destacar que es una de las pocas veces que no las acompañamos CON SOPA O CREMA. Ya que nosotros cocinamos, la Esculta se encargó de recoger.

Estuvimos un rato "sin hacer nada" (jugar a las cartas y hablar con los escultas) y luego nos fuimos a dormir. O, mejor dicho, a intentar dormir, ya que el comedor tenía una acústica y una reverberación tan importante que parecía que estuviéramos en una jungla tropical.


A la mañana siguiente nos levantamos con ganas de seguir haciendo cosas, y, tras desayunar y dejar el sitio en mejores condiciones de como lo encontramos, nos fuimos de "pateo" con la Esculta. Al pateo solo fuimos Néstor y Diana, ya que Fabiana tenía mal el pie y no podía ponerse zapatos cerrados ni caminar mucho.

Llegamos a Santa Cristina en apenas media hora, con una paradita de 5 minutos para recobrar el aliento en mitad de una cuesta de mil demonios. Después estuvimos investigando y descubriendo nuevos senderos y caminos por los alrededores. Así estuvimos hasta la hora de comer, ya que nos dirigimos a casa de Davi, donde nos esperaba una maravillosa sorpresa en forma de asadero.




Comimos hasta reventar y nos echamos la imprescindible semi-siesta hasta que tuvimos que ir a coger la guagua.

Llegamos otra vez a Don Benito y dimos por concluida la actividad, esperando poder seguir ayudando en este proyecto tan bonito y que el albergue esté listo para verano.



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